¿Por qué a veces nos cuesta vivir sin pareja?



1. Creencia de que el éxito se basa en tener pareja

Nuestra cultura nos transmite el mensaje de que el fin último de las personas es emparejarnos, sobre todo para las mujeres. Si no tienes pareja o no te casas a una determinada edad, comienzas a ser una “solterona”. Los hombres, sin embargo, pueden ser el “soltero de oro” y no pasa nada.


2. Basar la valía personal en el tener pareja

La ausencia de pareja a menudo se ve como un fracaso, fomentando creencias como que nadie te quiere, que no vales para nada si no tienes pareja. Que el no tener pareja se traduce en que hay algo malo en ti.


3. Una baja autoestima 

Cuando tenemos una baja autoestima buscamos diversas formas de que esta no baje más, o tener un aumento de autoestima, a menudo temporal. Cuando sentimos que gustamos a alguien nos sentimos muy bien, y podemos ver que nuestra autoestima recibe un empujón. Sin embargo, basar nuestro valor personal en algo externo como tener una pareja es peligroso porque puede fomentar conductas de dependencia, relaciones tóxicas, y un sentimiento de profunda tristeza y desesperanza cuando esa relación se termina. 


4. Miedo a lo desconocido

A menudo, las personas que no saben estar solas, realmente se debe a que tienen miedo a estar solas porque nunca lo han experimentado. Es posible que se hayan emparejado jóvenes y hayan estado muchos años en pareja. En el momento en que se quedan solteras buscan rápidamente un sustituto de esa persona, no quieren enfrentarse a la soledad simplemente porque no lo han vivido nunca.


Puede parecer muy obvio, pero la única manera de aprender a estar solo es, estando solo. Enfrentándose a la ausencia de pareja y trabajar para estar bien primero sin pareja. De esta forma, cuando encontramos a alguien nos emparejamos desde el deseo de compartir, no desde la necesidad. Mi autoestima no dependerá de la otra persona, y esto fomentará relaciones de pareja mucho más sanas. 

Artículo Anterior Artículo Siguiente